19 octubre 2022

El día que perdí la virginidad






 

Querido lector

 

¡Por fin! Después de mucho tiempo y muchas vicisitudes, el pasado viernes día 14 de octubre de 2.022, dejé de ser virgen.

Todo en esta vida tiene una primera vez y nadie nos prepara para ello. Y menos a mí que soy tímido por naturaleza. En esta ocasión, mi primera vez estaba llena de dudas, expectativas, miedo, emoción y nervios a partes iguales. A pesar de estar preparado física y mentalmente, no pude erradicar ciertos mitos que giran en torno a la primera vez:

-          Mito 1: Fue algo especial.

-          Mito 2: No existió riesgo de embarazo a pesar de no usar protección.

-          Mito 3: No hubo dolor ni sangre. Todo lo contrario, hubo mucho placer.

-          Mito 4: Al final llegué al clímax.

-          Mito 5: La gente me lo notó.

 

Hoy te lo voy a contar todo con pelos y señales. Más señales que pelos, que ya no se llevan.

Era una tarde soleada, hacia calor. Los cielos se tiñeron de colores rojo y anaranjados. Lo había preparado todo con sumo cuidado y cariño. No faltaba detalle, incluso compré un buen vino tinto de Rioja y uno blanco afrutado para la ocasión. Los preliminares fueron relajados y agradables. Cuando empezó el acto en cuestión, me aturullé recordando una persona muy importante para mí, pero hice una pausa, respiré hondo y todo empezó a fluir. No llegamos a usar lubricante, no hizo falta. Tampoco realicé muchas posturas, elegí una cómoda y todo el acto transcurrió en la misma posición. Utilizamos sobre todo la forma oral para conectar. Allí liberamos todo tipo de hormonas: oxitocinas, dopaminas, endorfinas… todas hormonas de la felicidad. Cuando terminé me sentí relajado y complacido. Es verdad que, siempre lo puedes hacer mejor y seguro que la próxima vez me supero, pero para ser la primera vez yo estaba más que satisfecho. Después estuvimos un buen rato charlando de cosas íntimas. No sé si me he vuelto adicto porque ya tengo ganas de repetirlo otra vez.

Tal como predije, al acto vinieron familiares y amigos principalmente. La sala casi se llenó, todo un éxito nunca imaginado por mi. No sé si eso me hizo tener más nervios o menos, al fin y al cabo, yo no soy un actor porno. Creo que, al final, hasta me aplaudieron. Muchas Gracias a todos los que dedicasteis un rato de vuestro valioso tiempo para compartir un momento tan especial conmigo. Gracias por vuestros abrazos, besos y muestras de cariño. GRACIAS, GRACIAS y mil veces GRACIAS. Espero que os lo hayáis pasado tan bien como me lo pasé yo.

Y, de este modo terminó la primera presentación de mi primer libro “Aventuras y desventuras de un bancario”. Si tú, querido lector, eres una de esas personas que por circunstancias de la vida no ha podido asistir a este evento, te animo a que te vengas al siguiente. Procuraré que nos lo pasemos "teta". ¡Anda tonto/a! Si no te voy a hacer daño.

 

Hasta la próxima entrada y, no te cortes en los comentarios que, yo tampoco lo haré en mis respuestas. 

 

Bss. 

 

 

P.D.: No olvides suscribirte al blog, si no lo has hecho todavía. Sigue siendo gratis. Pero mejor por la web que por el móvil no funciona. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario

El día que perdí la virginidad

  Querido lector   ¡Por fin! Después de mucho tiempo y muchas vicisitudes, el pasado viernes día 14 de octubre de 2.022, dejé de ser virgen....